domingo, 25 de junio de 2017

A las puertas del instante estoy

"La vida que espero y esperaré"

La vida, esa vida,  la que quería tener, la que todos nos hemos llegado a inventar sentados a la sombra en ese oasis ficticio.

Oasis de mis sueños, de mis ilusiones, de mis pensamientos.

Y ahí estoy,  ahí me encuentro, sola,  bajo esa sombra esperando que suceda lo que nunca pasa. "Como sabio en las cumbres del saber" meditando.

Oasis de utopías, de nuestros anhelos. Dejándome llevar cual alga en el mar de la calma, qué es mi propia existencia.

Observo, escucho, siento la vida que gira a mi alrededor, sabiendo que  "soy tabla de mi propia salvación" y como cada día, quiero, tengo, "me protejo, de mí misma voz" 

Esa voz que me habla, que me dice lo que a veces no quiero escuchar. Que me dice que salga de ese oasis, que corra, vuele, que nade. Que alcance esa tabla y flote en ella hasta encontrar lo que mi vida busca. 


Llegar a un lugar donde mi corazón y yo estemos tranquilos, en ese íntimo diálogo interno,  "donde reine un tibio sol"

Donde poder respirar y las espigas se mezan libres ante mis ojos, donde mis pies descalzos sientan el calor de la existencia dulce "o quizá donde andar"


Dudar es incertidumbre, es saber que no sucederá, no esperar, no esperar nada.
Sentir,  pensar, sentimientos ansiosos que no dejan descansar. 
Quiero reír, quiero darme, dar mi tiempo, "que crezcan ansiosos por enamorar", tengo tanto que dar todavía.


Nadaré, cambiaré, marcharé, con mi corazón a ese lugar al que todos pertenecemos "al lugar donde nací"

Buscaré mis raíces esas que se quedaron en ese mar antiguo. En esas caracolas en el fondo, que llenarán de nuevo mi vida. Llenarán todo lo que deje atrás.
 "Buscaré caracolas al fondo del mar, que inunden mi paladar"


Y lo haré ya "despliego mis velas que hay que partir". El jilguero canta junto al rosal. 
Feliz y dispuesto,  porque hoy ha dejado de ser ese pequeño pájaro para convertirse en un gavilán. 
" Hoy es un gavilán en celo" y se siente fuerte. 

Candiles de aceite me iluminaran en esta nueva etapa de mi vida,  es suficiente esa humilde lámpara. 

Me llenaré de lo que me gusta, crearé, recibiré la sabiduría de quien me quiera enseñar las cosas que siempre me gustaron, las inquietudes que quedaron atrás. "pintores holandeses mis manos manchan"

Compartiendo lo sabido, lo aprendido siempre.



Y en ese altar de la sabiduría que los años dan,  
"como polen nuevo me quiero esparcir en un total abandono" 

Dejándome llevar donde el aire me lleve. Sin poner trabas, viviendo, siendo yo. 

Sin límites, sin barreras, con virtudes y defectos. Un ser libre. Libre. Libre de mi misma voz.


Pero de nuevo, vuelvo al presente. Y ese candil de aceite se apaga, volviendo a mi ahora. Porque al fin y al cabo, y como siempre... 

"Sin llaves a las puertas del instante estoy "



Ese instante que sigo soñando, sentada en mi oasis, pero sin esas llaves. Las que nunca tuve y que quizá, nunca tendré.




SOMOS PURA ESENCIA DEL SENTIR MANOLERO